Acabo de leer en El Mundo que a Bill Gates (¿es necesario poner un enlance? :-)) le acaban de conceder el premio Principe de Asturias a la cooperacion Internacional.
Sinceramente, me alegro. Dejando aparte mis preferencias de software, que no van precisamente orientadas a windows, es admirable que Bill se gaste el dinero que se gasta (mas de 10.000 millones de dolares en los ultimos años) en la lucha contra enfermedades (especialmente malaria y tuberculosis) en el tercer mundo y en el desarrollo de programas (no informaticos) para erradicar enfermedades que en el primer mundo parecen no afectarnos y que sufren millones de personas que no han tenido la suerte de nacer en el lugar adecuado.
Y aunque desde luego cada uno gasta su dinero en lo que quiere, parece mas encomiable la postura de Bill Gates que la de su colega de toda la vida, Paul Allen.
Entre los gastos conocidos de este ultimo se encuentran el yate Octupuss (el segundo mas grande del mundo con 126 metros), otros dos yates que ocupan las posiciones 6 y 13 del mundo por tamaño, la nave suborbital SpaceShipOne (que gano hace pocos meses el premio por ser la primera de su categoria), museos (1,2,3) de ciencia y musica o la coleccion de guitarras de Jimi Hendrix.
Pues lo dicho, enhorabuena Bill. Al menos los que usamos Windows podemos alegrarnos de que nuestro sufrimiento sirva para labores humanitarias
